El castillo de Predjama fue construido alrededor del siglo XIII justo al pie de un acantilado y en la entrada de una cueva. Su aspecto actual se debe a las obras llevadas a cabo en s.XVI por el barón Philipp von Cobenzl que anexionó la parte renacentista que es la que está al borde del corte rocoso.
Después de pasar por diferentes amos o dueños fue en 1478 cuando fue adquirido por su habitante más conocido: el caballero Erazem, ladrón al estilo Robin Hood. Los antecedentes históricos demuestran que el caballero había incurrido en la ira de la corte imperial por dos motivos: el asesinato de un pariente del emperador en un duelo a muerte y de sus relaciones con los enemigos del emperador húngaro. El castillo fue sitiado por el ejército durante el invierno de ese año con la esperanza que Erazem y su gente murieran de hambre. Pero la leyenda dice que había un pasaje secreto entre el castillo y el valle de Vipava, a unos 30 kilómetros de distancia. El valle de Vipava está situado en una cálida parte de Eslovenia donde la gente cultiva una gran cantidad de verduras, frutas y cereales. El pasaje final se cree que está detrás del castillo. Erazem obtenía todos los alimentos del valle de Vipava y estuvo durante largo tiempo sitiado, por desgracia, uno de sus siervos le traicionó. Reveló el lugar en el cual se encontraba Erazem en aquel momento y fue asesinado de un cañonazo cuando estaba descansando en sus aposentos.
El nombre de Erazem todavía es recordado en nuestros días gracias a un torneo anual que se realiza en la pequeña villa de Predjama, cercana al castillo, el cual lleva su nombre.
Una visita a las salas restauradas del castillo, con instalaciones y mobiliario original, le da al visitante la oportunidad de ver cómo era la vida en el castillo y proporciona amplias pruebas de que los ocupantes del castillo eran más que capaces de defender su fortaleza. Entre las más interesantes están las estancias residenciales, la capilla y el calabozo. También se pueden ver armas, óleos y una escultura de la Piedad de 1420. Otras piezas, se conservan en el Museo Nacional de Ljubljana.
La cueva situada detrás del castillo tiene tres vías de acceso. La más conocida de ellas es a través del establo, donde se han encontrado restos de la Edad de Piedra tardía y Edad del Cobre, junto con lo que se consideran otros hallazgos de época romana. Un sitio interesante de la cueva es el Pasaje de los Nombres, donde las firmas de los visitantes datan desde el s.XVI en adelante. Algunas zonas son de difícil acceso y sólo pueden ser exploradas con guía y equipo adecuado… y buena forma física. Gracias a su posición y condiciones de temperatura, la cueva ha ganado algunos habitantes interesantes: una colonia de murciélagos. Por esta razón la entrada a la cueva no es posible en invierno, cuando los murciélagos están hibernando.
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